Encontrada en la red
Trenzo los tallos de cilantro y perejil
que más nos asemejan y, aún así,
no consigo aunar su frescura y borrar
las diferencias que cincelan el adiós.
Tal vez si no desisto de mi empeño,
consiga armar un cesto verde campo,
verde césped, verde esperanza,
verde. De ese verde que relaja,
te invita a desmadejarte en el llanto
y te acerca al azul. Azul aguamarina,
azul cielo, azul...con penachos blancos,
que asemejan pañuelos ondeando. Pañuelos
pájaro, que nos ayuden, con sus trinos,
en el gramal de silencios que cuartean
el paisaje abierto y turban el aire
con sus voces. Trenzo, imitando
a Penélope en su bordado mudo,
a la obsesiva e inquietante araña,
a Ariadna, asida a un hilo sin fin,
tallos de cilantro y perejil.